domingo, 16 de septiembre de 2012

Silencio al despertar

Yo no vivo, yo no muero.
Yo no existo, yo no duermo.
Yo soy furia, y a la vez miedo.
Soy tristeza, y también rezos.

No me tocas, no te miro,
no me hablas, no te siento.
Tu me sueñas en tu olvido,
yo te olvido en cada sueño.

Hoy sonríes, yo discrepo;
hoy caminas y yo repto;
hoy divides tu gran asombro,
mientras mi silencio es tu despojo.

Siento miedo y tu las sombras,
pierdes calma y yo tu derrota;
somos ojos de una hoguera muerta,
más de ti en mi que de mi propia huerta.

Cansado intentas sollozar sin luz,
mas mi velo aguarda tu soledad en cruz,
mientras tu sonrisa desaparezca en paz,
mi corazón seguirá aguantando vuestro triste final.

¿Dónde avanza la nodriza,
del dolor sin igual?
¿De qué sirve la paciencia,
si un día ha de acabar?

No me tomes por tormenta,
tu y yo somos igual;
y aunque no sientas mi pena,
en soledad podré aguantar.

Y aunque llore en mi silencio, te veras cruzar,
sentiras el miedo que yo al caminar;
y entre tanta risa, que crees sin mal,
entenderás que el tiempo, me ha llevado una vez más.

jueves, 13 de septiembre de 2012

Llanto

Cuando el canto del ave
embista la tristeza,
simulare estar sincera
y sin falta de alegría.

Mas el tiempo se acaba,
y mi ilustre ilusión perdida, 
no puede guardas las lágrimas
que el corazón dictamina.

¿Dónde esconden los dioses,
tal sufragio perdido,
ese chiste abatido,
de felicidad preciada?

Encontrada por unos días,
destinado a pagar meses,
para tan sólo sonreir,
unas horas al año.

¿Por qué continuo sincera,
cuando el calvario avecina,
y entre pena disimulo,
entristezco mi mirada?

Mas muy pocos son quienes guardan,
el silbido cautivo de presagio,
mientras mis ojos llorosos,
sólo acallan mis labios.

Y de salados caminos,
poco a poco van inhundando,
con amargas caricias,
mis mejillas perdidas.

Y con tristeza perdida,
mi mirada altiva,
no demuestra el llanto,
mas, las lágrimas, me condenan.

jueves, 6 de septiembre de 2012

El demonio y su olvido

Caminar en olvido,
triste manto he perdido;
simulando ser cautivo,
presa de alaridos.

Irrisoria sombra blanca,
circundante al camino,
reclama albaceos lirios
que sollozan su destino.

Campanas que guardan
tristemente tus sentido,
ya nada podra nuevamente
sentir tus amargos latidos.

Codornices que vuelan,
acechantes de tu ser,
llevando trozos de tu muerte,
más allá de este circel.

Miente el nombre y el cuerpo,
no es justo su haber,
pero dice ser infierno
y llevarte a con el.

Misterioso hombre erguido,
que vizlumbra al caminar,
respondeme una cosa,
¿eres aquel en verdad?

Temerosos de tu nombre,
muchos no te han de parar,
pero esta mujer airosa,
te suplica una vez más.

Dime quien eres,
dime que hacer:
dime hidalgo muerto,
¿serás tú quien me haga perecer?

Y de a poco entre susurros,
mil engranes han de encajar,
y con su mano apretando mi cuello,
silencioso has de hablar.

Insolente tu voz,
que se atreve a cuestionar,
los andares de esta bestia
de hace mil años atrás.

Más con miedo, que arrebato,
me impulso a liberar,
de sus manos mi cuello,
de su  silencio mi andar.

Hombre vizco, de tormenta,
bestia inmune a la soledad,
sólo te pido una respuesta,
¿he de perecer por tus manos al andar?

"Mujer cizañera,
la muerte te ha de tumbar,
mas mis manos hace tiempo
un castigo te han de entregar."

"Mi señor de las tinieblas,
permitamente cuestionar,
¿cuál es el castigo
al que me obligará andar?"

"Hace tiempo que ya cumples,
el misterio de vivir;
¿no recuerdas cuanto tiempo,
llevas sola en Carmín?

Cada hombre que muere,
te ofrece un alma con vida;
y en cada triste huida,
sientes mi prisa mendiga.

Mujer hermosa y airosa,
hace años te pedí
mas tu cuerpo dijo olvida
y en castigos has de morir. "

Y de pronto comprendí,
cien años sin morir,
cada vez se hacen más,
cada año es un abril.

"Misteriosa muchacha,
que sin miedo has de vivir,
rechazarme es tu condena
y hoy y aquí, siempre, has de sufrir."

Como llevaba dos días sin publicar, hoy un regalo nuevo, directo de la cocecha. Saludos.

lunes, 3 de septiembre de 2012

Imbuir

¿Sientes el dolor que yo sentí aquel día?
¿Sientes el temor que guardé en ese instante?
¿Sientes el sufrir que yo al llorarte?
¿Sientes la pena al verte incesante?

Huyes de la oscuridad,
como si pudieses escapar;
huyes de tu negro andar,
pero...erraste tu camino.

Corre, escapa; lejos de este lugar.
No vuelvas nunca, jamás mires atrás,
corre, vuela; no dejes que corra una lágrima más;
porque si lo haces, mi venganza llegará.

Cerraré mis ojos y no te veré huir,
me engañaré y diré que te terminé a tí;
pero si un día vuelves esa grisácea mirada,
nunca nadie te salvará de esta amarga alianza.

Destinado a la muerte, hoy tu cuerpo se  pudre;
escogido por la vida, hoy mueres deprisa;
ausente de recato y amargada sonrisa;
hace un instante, regresaste tu vista.

La recopilación al azahar de hoy! saludos.

sábado, 1 de septiembre de 2012

Poemas publicados en http://still-der-angel.livejournal.com/

Tu dolor es mio

Conozco esa mirada; has perdido algo;
conozco esa sonrisa, estás escondiendo tu llanto;
conozco esos ojos, que de tristeza están llenos;
conozco esos labios; que ese grito están ahogando...

Es tu silencio cuando te veo pasar;
poco me hablas, pero es obvio el malestar;
soy quien te conoce y te sabe descifrar;
pero nunca un consejo te podré entregar.

Por las noches vienes y te intentas convencer;
"Todo estará bien; si soporto un poco más, nada temeré"
y ese encanto en tus palabras, esa ficción de tu mirar;
la falsedad de tus labios, te conllevan a llorar...

Y entonces me miras, suplicante de consuelo;
"no, no puedo; llorar, yo no debo..."
es difícil no gritar, no romper a llorar;
es difícil no mirar, o junto a ti no continuar.

Tus ojos cierras fuerte; anhelando ocultar
esas lágrimas que poco a poco te invadirán.
Entonces esa sonrisa, aparece en tus labios;
me miras reflejando en tu mirada aquella falsedad.

"Prometí no llorar, y lo cumpliré aunque duela;
además, ¿para qué llorar?; no es su obligación
el tenerme que recordar; no es su obligación
el que por mi, se haya de preocupar..."

Abres la puerta y te vas...
vuelves de vez en cuando a inspeccionar
aquellas lagrimas; que no demuestren tu soledad,
aquella falsa sonrisa; que parezca real...

Y yo sólo te miro, reflejando tu actuar;
en mi cristal es fácil de divisar
aquella tristeza que no podré difuminar;
aquel dolor ingrato, que éste espejo
aún no logra borrar...
Dos partes de un Todo
Soy tu mirada, también tu sombra
soy tu conciencia y también, tu obra;
soy quien te añora y a la vez te odia;
soy quien te cuida y a la vez, traiciona.

Soy mil mentiras, que saldrán de mi boca,
soy una amistad que no vale lo que importa,
soy pordiosera de tu misericordia
y añorante eterna de tu tímida gloria.

Cuéntame un secreto que a nadie más has dicho,
cuéntame ese anhelo que ocultaste en lo profundo,
cuéntame ese grito como un susurro en el oído;
que libere tus penas y a la vez, de tu condena.

Se q no existes, pero que eres alguien;
sé que eres invento de mi mente muerta;
sé que indicio de mi viva locura;
sé, que en lo profundo eres alguien ahora.

Dicen q no eres quien yo creo que eres;
que no existes, que realmente estas en mi mente;
dicen q me mientes, que cuando sonríes mueres;
dicen que me robas la vida y existencia.

Pero no lo creo ahora, ni lo creeré nunca;
eres quien yo creo porque eres mi creación;
si yo digo "grita" gritaras con devoción;
porque soy tu dueña y de tu pertenencia;
porque soy quien eres y eres quien soy;
porque somos uno y entre ambos, dos;
porque mi cuerpo es compartido;
porque yo escucho tus latidos;
porque conozco tu suplicio;
porque en realidad, nunca fuimos dos;
si no, ambas partes de mi propio yo.
 Hace ya tanto

Recuerdo tu cariño;
tan sincero y tranquilo.
Recuerdo tu sonrisa;
tan real y optimista.

Recuerdo tu mirada;
esmeralda y con esperanza;
junto a tu dorado cabello
por el viento llevado.

Recuerdo tus bromas;
tu compañía, tu amistad.
Recuerdo tantas cosas
que ahora, perdidas están.

Hubo tiempo alegre,
con la inocencia presente;
un  tiempo distante
pero muy significante.

Un tiempo que extraño
y sé, tu también;
un tiempo que realmente
pudo continuar.

No te culpo por odiar,
pésimo fue mi actuar;
no te culpo por golpear;
merecido me está.

Nunca le he hablado
de aquello a nadie
que problemas
pudiese causarte.

¿Amor u obsesión?
¿cuál es de las dos?
¿realmente sabes diferenciar
la verdad entre dos?

No conozco tu mente,
pero sí tu actuar.
Me siento un tanto débil,
por no poderte ayudar.

Sé que eres fuerte
y podrás continuar,
pero si continuas rondando,
no sé cuanto podré aguantar.

Mi debilidad
no te mostraré,
pero lo sabrás
con sólo mis ojos mirar.

Al fin y al cabo,
hace mucho fuiste cercano,
y por ello,
te veo tan lejano.

Mírame un instante
y di lo que realmente sientes;
no amenaces,
no alces tu mano.

Sé, que puedes hacerlo bien.
Mírame un segundo
y di lo que realmente sientes ,
no intentes nada más...

Recuerdo aquellos juegos
que solíamos jugar;
aquellas verdaderas sonrisas,
que un instante,
ya no vi más...

Tu presencia en mi Caminar
Que sola me siento al ver que no estas,
Y le pregunto a la brisa;
“¿Será qué en mi pensarás?
O ¿te has olvidado por completo,
De qué existo en verdad?”

Y tu nombre pronuncio,
Como esperando llamar,
Como esperando ver
Tu silueta en mi caminar.

Pero lo sé irreal,
Ficción pura es mi pensar.
Ahora te extraño,
Y en ti, no dejaré de pensar.

Porque te has alejado,
Por mi causa y nada más.
Mas aún espero inconsciente,
Tu regreso, impaciente.

Pero esperare por siempre,
Deseosa de verte llegar,
Sin importar cuanto tardes,
Yo te veré regresar.

Si llegarás a volver,
Prometo sin jugar,
Que pronunciare esas palabras
un “te amo”, sincero en verdad.

 El susurro de una traición
Un susurro, una mentira.
Una mirada, un llanto,
Su temor y su angustia,
Se vieron unidos en aquel manto.

Se pasó por quien no era,
Y mil veces deseó olvidar,
Contempló su herida abierta,
Y sin palabras decidió ignorar.

Con cierto enfado le dijo adiós,
Sin creer la desconfianza.
Le dejó pensar lo que quisiera,
Mas, su arrepentimiento continuó.

Sus palabras, escritas mentiras,
Simulación encandecida.
Su dolor maldecía
Y sus palabras escribía.

Esa noche no lloró,
No importó cuanto lo deseó,
Para él no fue ella,
Quien supo de aquella traición.

Prefirió esconder su dolor,
Aunque por dentro se quebró,
Con desilusión se acostó,
Y simplemente durmió.

Pero en sus sueños confesó,
Tristemente, su dolor,
Su amargura y su traición,
Su mentira y su amor.

Una lágrima cayó,
Desde sus ojos cerrados,
Que envolvían el sueño,
Tristemente añorado.

Entonces despertó,
y muy bien disimuló,
sonreír escondía el llanto,
que por dentro, ella notó.

Y nuevamente le encontró,
Y su simulación continuó,
Por lo cual juró,
Que la verdad olvidó.

Y hasta hoy no recuerda,
Lo que realmente ocurrió,
Sin embargo recordó,
Que a su amor, debe decir adiós.
 Tu indiferencia a mi sentir
Me duele tu indiferencia,
Tu indiferencia a mi sentir.
Bien, acepto que soy fría, pero,
¿te da el derecho de tratarme así?

Sólo deseo sentirme querida,
Perfecto, aceptaré que es por ti.
Sin embargo no lo haces así,
Simplemente, te desquitas en mi.

Duele que me culpes por lo que va mal,
Pero, ¿te has puesto a pensar que quizá,
No es mi culpa en verdad?

Lo sé, no debí quererte, no debo amarte,
Pero debo decírtelo, aunque me fuese a costar,
Pero me cuesta hablar o escribir,
No me es fácil de decir.

Si, sufro por idiota, me aferré a ti,
Pero dime, ¿qué puedo hacer?
Si desapareces, mi vida también tendrá fin,
Porque lo único que creo tener es a ti

Me duele tu indiferencia,
Tu indiferencia a mi sentir.
Bien, acepto que soy fría, pero,
¿te da el derecho de tratarme así?

Sólo deseo sentirme querida,
Entre tus brazos estar tendida,
Sentirme amada y necesitada,
¿puedes hacerme sentir así?
 Inocencia
¿Conoces la soledad
a la que estoy condenada
¿Conoces la verdad
que guarda mi mirada?

¿Conoces la falsedad
que esconde cada palabra?
¿Conoces el pensamiento
que cada mentiroso guarda?

No, tu pensamiento
rechaza las verdades,
y es que tu inocencia
no cree en las maldades.

Y es que eres demasiado noble
para desconfiar de la vida
o percatarte que en el día
la oscuridad domina.

Y es que en tu mirada predomina
aquella falsa alegría,
que te esfuerzas en creer
y que maldice tu ser.

Debes despertar
aquel dolor de tu vida
y preparar tu venganza
para así poder crecer.

Si no lo haces así
tu dolor continuará
y aunque creas en tu felicidad
perfectamente sabras
la falsedad de tus palabras
y de tu dolorido mirar.
Falsedad
Puedo mentir y decir
que del cariño
me falta necesidad
o que el dolor se aguantar
o que nunca una sonrisa
desearé entregar.

Puedo mentir y decir,
demostrar mi frialdad,
el irreal dolor alejar,
sonreír, mirar, hablar,
mentir, susurrar, no llorar;
pero por dentro, conozco mi oscuridad.

Puedo mentir y decir
que nada siento en verdad,
que no me duele la soledad
o que el temor se aguantar,
que en los sueños permanece el dolor,
y que es fácil a la realidad ignorar.

Pero quien me conoce realmente
sabe de la falsedad de mi hablar,
conoce la mentira en mi mira,
o las lagrimas que mi rostro
esconde a los demás.

Y por aquello abrazará
mi tembloroso cuerpo,
contra mi voluntad,
hasta que logre, una vez más,
fingir mi bienestar.

 Duquette
Fuiste presente durante un instante,
con tus desgastados ojos, vigilantes,
admirabas el día sin pensar en lo que venía.
Ignorabas tus raíces
y jugabas al mandato;
nunca obedecías y demandabas cambios,
como creyendo ser aquel
a quien el sol alumbraba
por ser un dios en el acto
y que con una mirada
todo estaba controlado.

Nunca oíste de advertencias
y siempre rechazabas la decencia;
jugaste con tu vida y en un instante
ya no la tenías.
Y recordaste entonces
cuanto te habían amado,
cuanto te habían rogado,
y cuanto te habían cuidado.

Todo aquel tiempo
que sólo a ti fue dedicado;
que desperdiciaste siempre
y que en ése instante,
era ya extrañado.

Nunca viste con los ojos,
siempre ciego tu corazón;
nunca oíste con los oídos,
siempre sordo fue tu interior;
demasiado tú, en aquella vida
como para percatarte de la realidad,
y en aquel instante
en que todo te fue robado,
sólo fuiste capaz de pensar
en todo lo desperdiciado,
en todo lo equivocado,
en todo lo deseado
y alguna vez implorado.

Maduraste enormemente,
tarde, para ser fuerte,
y, aunque no estuve allí, bien sé,
que si una lágrima derramaste
fue sólo por comprender
cuan mal habías actuado
y cuanto mal habías causado.

Con sinceridad, yo te culpo
por el dolor que sentí,
mas, sólo me resta decir
que en mi memoria estás tú.

Aunque tu recuerdo,
con el tiempo se valla haciendo viejo,
latente estará mi dolor por dentro.
Y aunque a todos sonría,
en tu tumba sabrás,
que por dentro lloro
sólo, porque sé que desperdiciaste
tu única oportunidad.

Recopilación de los escritos publicados en  http://still-der-angel.livejournal.com .
Saludos, Sayuri Bezarious.
~ Still der Angel ~

Madelaine Brenan

Si un día de estos, te acecha mi mirada,
no devuelvas la vista, no bajes la guardia:
si un día de estos, sientes que todo va en calma,
 no vislumbres lo muerto, sólo intenta amarla.

Pasará la noche, y en vela el desorden,
obligará a tus mano, vivir atadas;
promete que aprenderás a surtir deseos,
promete que el tiempo no mutilará tu anhelo.

Y si caminas perdido y no encuentras consuelo,
resguardate en su mirada, acaricia su cielo;
despues del tiempo, amarás lo bello
y sabrás de lejos, correcto el hecho.

No regreses la vista ni los recuerdos pasar;
dibuja una sonrisa, que yo jamás podré quitar,
y aunque ella sepa que mientes, permítele ayudar,
intenta ser justo, porque tu elección has de aclarar.

Aun si su manto no protege tus sentimientos,
aun si el día carece de fuerza y deseo;
no consueles tu alma, esperándome llegar,
estaré distante y no me acercaré jamás.

Y si un día de estos, puedes verme a lo lejos,
no corras a mis brazos, sólo dime que estas cuerdo;
si un día de estos, recuerdas lo viejo,
saluda la sonrisa que enterramos hace tiempo.

Porque lo muerto jamás florecerá, 
la historia escrita, dicta otro final;
tu y yo somos juegos del placer infernal
y  aún amando, la vida, no nos ayudará.

Desiste de cumplir esta entretención barata,
ese Dios del que hablan, nos mirará una vez más;
reirá del dolor que tu alma guarda,
y coleccionará la sangre, que mi herido corazón, 
derrama y jamás, dejará de derramar.

Basicamente, el poema se inspira por una sección propia de una historia, o intento de libro, que estoy escribiendo y en vista de que queda clara la situación, creo innecesario especificar el momento del libro. Por ello es el nombre, uno de los personajes vendría a ser la afectada.

Intentaré comenzar a publicar poemas, así me animo a seguir escribiendo; este es nuevo y se me dió por escribirlo recien. Si logro ser constante, publicaré poemas antiguos a diario y por lo menos una o dos veces por semana, algo nuevo aportaré. A aquel que se instigó y preocupó de leer esta sencilla creación, le doy el más profundo de los agradecimientos, como escritora creo que el mayor regalo es que alguien pueda creer que mis creaciones valen la pena una pequeña perdida de su tiempo. Saludos y si alguien desea comentar, no presente inconvenientes; críticas son bienvenidas para seguir aprendiendo y felicitaciones acrecen mis deseos.
Cordialmente despidiendome, Sayuri Bezarious.
~ Still der Angel ~
 

miércoles, 27 de enero de 2010

Escrito el 17 de Agosto del 2009

Para comprender la trama del poema; deben verse en la situación de ser dos en uno, una doble personalidad, donde una es la verdadera y la segunda sería causante de sus mayores pesares, mas, que muestra apreciarles y arrepentirse por lo hecho, pero lo argumenta necesario para la felicidad de la otra; ambas saben de la existencia de la otra y, en cierta forma, se comunican constantemente.

¿Crees que realmente importas a alguien?,
sabes perfectamente qye nadie te recuerda.
¿Crees que vendrá alguein a calmar tu tristeza?,
por favor, a nadie le interesas.

¿Crees que con llanto se acabará tu pena?,
reconoce que nadie te abrazará por cariño;
entiende que el mundo no te toma en cuenta
y que tus palabras en silencio se extravían.

Lo sé, cuesta aguantar aquel dolor,
pero no te permitiré sufrir otra vez;
escúchame, sé lo que te hará bien:
cierra tus ojos, borrando su color.

No importa la acción, siempre espera dolor; 
no confies en nadie, siempre habrá mala intención.
Avanza en silencio, no escuches a nadie;
no contestes las mentiras que en sus labios demuestran.

Sonrisas fingidas, miradas altivas;
palabras vacías, no cierra tu herida.
No sabes porque te levantas  día a día,
cada hora que pasa más sangre es perdida.

¿Sientes aún pena?¿Recuerdas la alegría?
Aguarda otro poco, ya no queda tanta vida.
No abraces la sonrisa  por la que te sientes atraída,
tan sólo rechaza el brillo que su mirada convoca.

Dime, ¿qué tan fuerte eres?
sabemos que no conseguirás lo que quieres;
¿por qué luchas?, ¿por qué te esfuerzas?
Es obvio que no ganarás lo que esperas.

Olvida su rostro, su voz y su dolor;
con ello será fácil deshacerse de la tentación.
Divisa su rostro y no importa lo sincero;
rechaza el sentimiento que nace dentro.

Olvida el sentir sincero,
recuerda el dolor que traen tus recuerdos;
abraza la duda de la vieja historia;
tan sólo recuerda que es tu vida o la suya.

La primera entrada , no muy buena, pero es lo que hay. Gracias a aquellos que se dieron el tiempo de pasarse por aquí y leer.